El papa Francisco será sometido esta tarde a una intervención quirúrgica programada para «una estenosis diverticular sintomática del colon» en el hospital Policlínico Gemelli de Roma, informó el Vaticano.
La operación será llevada a cabo por el doctor Sergio Alfieri y a su término se emitirá un boletín médico, indicó el portavoz vaticano, Matteo Bruni, en un escueto comunicado.
Este mismo domingo, como suele hacer, el papa ofició el rezo del Ángelus en la plaza de San Pedro. El papa anunció que viajará a Eslovaquia del 12 al 15 de septiembre próximo, tras concelebrar la mesa final del Congreso Eucarístico Internacional que tendrá lugar en Budapest.
«Me siento orgulloso de anunciar que del 12 al 15 de septiembre próximo, si Dios quiere, me desplazaré en Eslovaquia para hacer una visita pastoral», dijo al término del rezo dominical del Ángelus ante las decenas de personas reunidas en la plaza de San Pedro del Vaticano para escucharle.
Francisco explicó que antes del inicio de la visita concelebrará en Budapest la mesa final del Congreso Eucarístico Internacional y quiso dar las gracias a todos los que están preparando el viaje.
El portavoz vaticano, Matteo Bruni, precisó en un comunicado que «por invitación de las Autoridades civiles y de las Conferencias episcopales, el domingo 12 de septiembre de 2021, el papa viajará a Budapest con ocasión de la Santa Misa conclusiva del 52º Congreso Eucarístico Internacional».
«Sucesivamente, del 12 al 15 de septiembre de 2021, viajará a Eslovaquia, visitando las ciudades de Bratislava, Prešov, Košice y Šaštin. El programa del viaje será publicado a su tiempo», añadió.
El anuncio del viaje realizado por el papa fue acogido con vítores entre los presentes en la plaza de San Pedro, ante lo que el papa exclamó: «están contentos los eslovacos», además de enviar un saludo a todos los fieles.
Durante el Ángelus, Francisco se refirió a la necesidad de superar la «comodidad de la costumbre» y «la dictadura de los prejuicios», que son «un riesgo que todos corremos: pensamos que sabemos mucho de una persona, la etiquetamos y la encerramos en nuestros prejuicios».
Johnson & Johnson ha anunciado este jueves datos que demuestran que Janssen, su vacuna contra la COVID-19 de una sola dosis, genera una actividad «fuerte y persistente» contra la variante Delta y otras de alta prevalencia. Además, los datos mostraron que la durabilidad de la respuesta inmunitaria se prolongó durante al menos ocho meses, el periodo de tiempo evaluado hasta la fecha.
Por otra parte, el aumento de la incidencia del coronavirus en jóvenes de 12 a 29 años se ha convertido en la principal preocupación de las autoridades sanitarias y de la comunidades autónomas, algunas de las cuales han vuelto a ajustar las restricciones y la reapertura del ocio nocturno para frenar la expansión del virus.
La incidencia de la Covid-19 se dispara y roza ya niveles de riesgo alto pese a batirse el récord de vacunación diario, y se ceba con Cataluña, Cantabria y Andalucía, con las mayores tasas de contagios por cada 100.000 habitantes, 238,218 y 168 respectivamente.
La Comunitat Valenciana ha decidido prorrogar durante dos semanas más y hasta el 15 de julio las restricciones vigentes contra la expansión de los contagios de covid-19 y detener por tanto la desescalada ante el aumento de los nuevos casos en esta región, que ha visto crecer la incidencia desde que permite la entrada de visitantes. La incidencia sigue repuntando también en otras regiones como Cantabria, Galicia, La Rioja o Cataluña, donde la epidemia de coronavirus vuelve a estar descontrolada: crecen de nuevo los hospitalizados, se han registrado 2.707 nuevos diagnósticos en las últimas 24 horas, la velocidad de propagación (Rt) ha subido a 1,35, y el riesgo de rebrote ha ascendido 22 puntos desde ayer.
El Ministerio de Sanidad notificó este lunes 10.179 nuevos contagios y 10 muertes por covid-19 desde el pasado viernes, lo que eleva el acumulado desde el inicio de la pandemia a 3.792.642 y 80.789, respectivamente. Además, la incidencia registró su cuarta subida consecutiva, al ascender cinco puntos en los últimos tres días y situarse en 100 casos por 100.000 habitantes. Sobre este incremento se pronunció el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, que no cree que se deba a la variante delta, sino «a que tenemos poblaciones no inmunes entre las que está circulando el virus».
Respecto al ‘macrobrote’ de covid entre estudiantes de viaje en Mallorca, ya hay identificados 1.267 contagios. La presidenta balear, Francina Armengol, ha pedido que quien piense en ir a Baleares sin cumplir las normas, «que se quede en su casa». El BOE ha publicado este martes las nuevas exigencias para los turistas británicos, que tendrán que presentar un certificado de vacunación o una PCR negativa a partir del próximo viernes.
Algo más de la mitad de la población en España ha recibido ya la primera dosis de una de las vacunas contra la Covid-19 aprobadas por la Comisión Europea para su administración, lo que supone que 38.808.490 personas han iniciado el proceso de inmunización.
Desde que arrancase la campaña de vacunación el pasado mes de diciembre de 2020, casi medio año, más de 15 millones de personas ya tienen la pauta completa de vacunación, esto es, cerca del 32% de la población, según las últimas cifras ofrecidas por el Ministerio de Sanidad.
«El siguiente objetivo es que, en la semana del 19 de julio, el 50% de la población cuente con la pauta completa», subrayaba en rueda de prensa este miércoles la ministra de Sanidad, Carolina Darias. Por esta razón, la Comisión de Salud Pública aprobaba este martes la octava actualización de la ‘Estrategia de Vacunación frente a COVID-19 en España’ que incluye a tres nuevos grupos para vacunar: el de personas con edades comprendidas entre los 30 y 39 años, de los 20 a los 29 años y entre 12 y 19 años.
¿En Qué Fase Se Encuentra La Campaña De Vacunación?
Ante el avance del ritmo de vacunación, cada vez son más personas las que están siendo citadas para vacunar, ya que prácticamente todas las comunidades han comenzado a administrar las primeras dosis a las personas de 40 años en adelante y algunas comenzarán en los próximos días con la franja de los 30 a 39 años.
Respecto a la distribución de las vacunas disponibles, la vacuna desarrollada por AstraZeneca está indicada para personas a partir de los 60 años de edad, mientras que la de Janssen se comenzó a utilizar en un primer momento en el grupo de 70 a 79 años, después en mayores de 60 años y actualmente se administra también a personas entre los 18 y 65 años. Además, se recomienda la administración de este suero a personas con vulnerabilidad para recibir dos vacunas.
En cuanto a los medicamentos desarrollados por Pfizer y Moderna, se continúa vacunando a personas de riesgo, al grupo con edades comprendidas entre los 50 y 59 años, así como a las personas a partir de 40 años. Pero, ¿cuáles son los efectos secundarios de cada vacuna? Hasta el 30 de mayo, se han registrado «un total de 24.491 notificaciones de acontecimientos adversos, lo que correspondería a 93 notificaciones por cada 100.000 dosis administradas», señala la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) en su último informe del 15 de junio de Farmacovigilancia sobre Vacunas COVID-19. No obstante, como recuerda la AEMPS, «los acontecimientos adversos que se notifican no significa que estén relacionados con la vacunación».
Los Efectos Adversos Más Frecuentes De La Vacuna De Pfizer
La vacuna desarrollada por Pfizer y BioNTech fue la primera en ser aprobada para su comercialización y administración tras el visto bueno de la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés).
Hasta el momento, se han administrado en España 26.487.532 dosis de este suero y las reacciones adversas más comunes entre la población vacunada son las siguientes: dolor en el lugar de inyección (>80%), fatiga o sensación de cansancio (>60%), cefalea (>50%), escalofríos (>30%), artralgias (>20%), fiebre e inflamación en el lugar de inyección (>10%), informan en el Ministerio de Sanidad. Todos estos síntomas son de intensidad leve o moderada y acaban desapareciendo al poco tiempo tras la vacunación. Asimismo, «son más frecuentes tras la segunda dosis y la frecuencia disminuye con la edad», indican desde Sanidad.
Tras la notificación de diversos casos de miocarditis y pericarditis detectados en Israel, la evaluación continúa en marcha y por el momento «no se puede establecer que exista una relación causal entre la aparición de miocarditis o pericarditis y la vacunación», destaca la AEMPS en su informe.
Los Efectos Adversos Más Frecuentes De La Vacuna De Moderna
En cuanto a la vacuna desarrollada por Moderna, ya se han administrado cerca de tres millones de dosis a la población en España de todas las recibidas. Así, los efectos más comunes identificados fueron los siguientes: dolor en el lugar del pinchazo (92%), fatiga (70%), cefalea (64,7%), mialgias (61,5%), artralgias (46,4%), escalofríos (45,4%), náuseas/vómitos (23%), fiebre (15,5%) e inflamación en el lugar de inyección (14,7%). Al igual que sucede con la vacuna de Pfizer, estas reacciones suelen ser leves o moderadas y desaparecen al día siguiente o a los pocos días de la vacunación. Según las últimas conclusiones de la AEMPS en su evaluación periódica, se ha identificado la diarrea «como una nueva reacción adversa que puede suceder con la vacuna COVID-19 Vaccine Moderna», por lo que se incluirá en su ficha técnica. Asimismo, también se han notificado «reacciones retardadas en el lugar de la inyección» que pueden aparecer «varios días después de haber recibido la vacuna y no deben confundirse con una celulitis», aclara.
Asimismo, la última actualización de la ‘Estrategia de Vacunación’ del Ministerio de Sanidad, con fecha del 22 de junio, incluye un nuevo efecto secundario que puede aparecer a los pocos días de recibir la vacuna. «Se han descrito reacciones cutáneas tardías cercanas al lugar de inyección que ocurren unos 7 días (entre 2 y 12 días) después de recibir la vacuna de Moderna y que fueron descritas como placas rosáceas edematosas, pruriginosas y dolorosas», destaca el documento.
Esta reacción adversa «puede aparecer antes tras la segunda dosis» y parece resolverse al cabo de cinco días, aproximadamente, aunque «en algunos casos pueden persistir hasta 21 días», añaden.
Los Efectos Adversos Más Frecuentes De La Vacuna De Janssen
Algo más de un millón de personas en España han recibido esta vacuna de una sola dosis y según Sanidad los efectos secundarios más frecuentes son: el dolor en la zona de la inyección (>40%), cefalea, fatiga y mialgias (>30%), náuseas (<15%) y fiebre (9%).
Respecto a los casos del síndrome de trombosis con trombocitopenia, la AEMPS recuerda la importancia de «investigar posibles signos de trombosis en pacientes a los que se les diagnostique trombocitopenia en las tres semanas posteriores a la vacunación», al igual que aquellos que presenten coagulación en los vasos sanguíneos.
Así, «se añade el dolor de piernas, convulsiones y cambios en el estado mental» como posibles síntomas de este síndrome, que se unen a la cefalea intensa, visión borrosa, hematomas en la piel, disnea, dolor torácico o hinchazón de piernas.
Los Efectos Adversos Más Frecuentes De La Vacuna De AstraZeneca
La vacuna desarrollada por AstraZeneca es la que más se ha administrado a la población en España después de la de Pfizer con un total de 6.588.022 dosis administradas hasta la fecha. No obstante, su uso dejó de estar indicado para menores de 60 años por la aparición de episodios de trombosis con trombocitopenia. En este sentido, según los datos recogidos por Sanidad, las reacciones adversas más habituales entre las personas vacunadas fueron las siguientes: sensibilidad en el lugar de inyección (63,7%), dolor en el lugar de inyección (54,2%), fatiga (53,1%), cefalea (52,6%), mialgias (44%), artralgias (26,4%), escalofríos (31,9%), náuseas (21,9%) y fiebre (7,9%). Estas reacciones fueron en su mayoría leves y se manifestaron con mayor frecuencia en personas más jóvenes. Asimismo, «existe un riesgo muy infrecuente de trombosis con trombocitopenia, sobre todo en personas menores de 60 años y mujeres».
Por otra parte, el Comité Europeo de Farmacovigilancia (PRAC, por sus siglas en inglés) ha finalizado la evaluación de las reacciones alérgicas tras la administración de esta vacuna y ha incluido la urticaria como «una nueva reacción adversa poco frecuente», esto es, «que ocurre en menos de 1 de cada 100 personas».
El PRAC también ha concluido una revisión sobre la señal del síndrome de fuga capilar sistémica, un trastorno grave muy poco frecuente, tras la vacunación con AstraZeneca. «La conclusión principal es que las personas que tengan antecedentes personales de dicho síndrome no deben ser vacunadas con Vaxzevria», aclara la AEMPS. Además, «este síndrome se debe añadir a la ficha técnica como posible reacción adversa».
Cuando empezó la pandemia de coronavirus, uno de los objetivos claros era alcanzar cuando antes la llamada inmunidad de grupo, es decir, que hubiera suficientes personas inmunes, bien sea por haber pasado la Covid y por ser vacunada, para frenar la transmisión. Pero puede ser una utopía.
Así lo cree el infectólogo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) Alejandro Macías, que fue entrevistado por la CNN acerca de las nuevas variantes del coronavirus.
«Las variantes van a seguir apareciendo y las que se transmitan con más faciliadad van a sustituir a las locales», dijo Macías. «En EE UU la variante delta representaba entre el 3% y el 5%, pero en menos de cuatro semanas es ya el 20%, Va a haber un crecimiento logarítmico», señaló el experto.
«Aunque haya menos casos, los que haya serán de esta variante (delta)», dijo Macías. «La India es un verdadero laboratorio de variantes, y es donde se está produciendo la delta», explicó el infectólogo.
Para Macías, la solución sigue siendo «vacunar y evitar lugares atiborrados de gente». «Poner una barrera a las variantes es imposible», dijo Macías, que insistió en que «hay que vacunar rápido».
Sobre la inmunidad de rebaño, Macías es claro: «Nunca la vamos a alcanzar, aunque cada vez nos parecerá más cercana». «Decíamos que la alcanzaríamos con un 66%, y eso en México ya lo tenemos, pero no consideramos en un principio que el virus iba a estar cambiando. Parece que la alcanzamos y se aleja un poco más», dice el infectólogo.
«(El coronavirus) ya nos mostró que no va a desaparecer, se va a quedar con nosotros y a lo que podemos aspirar es a convivir con él y a tenerlo contenido», concluye el experto.
En medio de una preocupante escalada de la variante delta de la covid-19 en España, que tiene todas las papeletas de ser la próxima cepa dominante de la transmisión en Europa -la previsión del Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) es que supondrá un 90% de los casos de coronavirus en la Unión Europea (UE) a finales de agosto-, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha introducido una nueva mutación dentro de su lista de ‘variantes de interés’.
Se trata de lambda o C.37, detectada por primera vez en agosto de 2020 en Perú y clasificada «de interés» (VOI, por sus siglas en inglés) por la OMS desde el 14 de junio de 2021. La región de Arequipa, en la sierra sur de Perú y con cerca de un millón de habitantes, estableció la semana pasada restricciones contra el avance de la pandemia ante la confirmación de un segundo caso de la variante delta, procedente de la India, y el incremento de contagios y decesos debido a la variante lambda, la primera que llegó al país andino el año pasado. En esta región, el 90,6% de los casos se deben ya a la variante C.37 o lambda.
Desde el Instituto de Salud Global de Barcelona destacan que la variante lambda ha sido clasificada «de interés» debido «a su elevada presencia en Perú y otros países de Sudamérica». Según la inmunóloga Adelaida Sarukhan, «lambda porta mutaciones que podrían aumentar su transmisibilidad o su capacidad de evadir la respuesta inmunitaria, pero hay muy poca evidencia por el momento».
Según recoge la última actualización de la OMS sobre variantes del SARS-CoV-2, el nuevo coronavirus que causa la covid-19, las cepas que actualmente están clasificadas como «de preocupación» son Alpha (B.1.1.7, surgida en Reino Unido), Beta (B.1.351, emergente en Sudáfrica), Gamma (P.1, original de Brasil) y Delta (B.1.617.2, anteriormente conocida como variante india).
Por otro lado, en la lista de variantes «de interés» figuran las variantes denominadas Epsilon (B.1.427/B.1.429, surgida en marzo de 2020 en EE UU), Zeta (P.2, detectada en abril de este año en Brasil), Eta (B.1.525, identificada en varios países desde el pasado diciembre), Theta (P.3, surgida en enero en Filipinas), Iota (B.1.526, detectada en EE UU en noviembre de 2020), Kappa (B.1.617.1, original de India e identificada en octubre de 2020) y Lambda (C.37, identificada en Perú en el pasado mes de agosto).
La diferencia entre variante clasificada como «de preocupación» y «de interés» por la OMS radica en que las primeras suponen un «aumento de la transmisibilidad o cambio perjudicial» epidemiológico, así como un «aumento de la virulencia o cambio en la presentación clínica de la enfermedad», además de que consiguen disminuir la eficacia de las medidas sociales y de salud pública o de los diagnósticos, las vacunas o las terapias disponibles. En cambio, las segundas se han identificado como causa de transmisión comunitaria u origen de múltiples casos, o se han detectado en varios países.
Respecto a la última variante andina considerada ‘de interés’ por la OMS, según la base de datos GISAID, esta cepa está presente en 25 países, sobre todo latinoamericanos, pero también europeos. De hecho, España ya ha detectado 44 casos, once de ellos en las últimas cuatro semanas, lo cual representa el 0,7% de los casos totales en este periodo de tiempo.
España, muy vinculada a Latinoamérica, es el séptimo país del mundo donde actualmente se han registrado más casos de la variante andina, por detrás de Chile, donde se han identificado 670 casos de la cepa C.37 hasta la fecha, EE UU (con 524 casos), Perú (con 222), Alemania (87), Argentina (86) y México (57).
«Seguirán Llegando»
La ministra de Sanidad, Carolina Darias, afirmó este jueves durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros extraordinario en el que se aprobó la flexibilización del uso de la mascarilla al aire libre que «sabemos que el modus vivendi del virus es mutando y hasta que no controlemos la pandemia va a seguir mutando», indicó al ser preguntada por el avance de la variante Delta. De esta cepa alertó este viernes el viceconsejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Antonio Zapatero, que en rueda de prensa informó de que ya supone «más del 10%» de los casos en la región.
Sobre las variantes también se pronunció este miércoles el enviado especial de la OMS David Navarro en una entrevista en la cadena británica Sky News, en la que advirtió de que «seguirán llegando» y que «ese problema de las variantes es lo que estamos observando en todo el mundo».
«Van a seguir viniendo. Iremos de Delta a Lambda y luego a las otras letras griegas. Eso es inevitable, y algunas de estas variantes serán problemáticas, podrán romper la protección relacionada con la vacuna en algunas personas y eso causará problemas», abundó.
El levantamiento de la obligatoriedad de llevar mascarilla en el exterior era una de las noticias más esperadas de los últimos 13 meses y parecía que la mayoría de la población iba a echarse a las calles este sábado, luciendo sonrisas, como proponía la ministra de Sanidad. Pero la reacción de la ciudadanía ha sido más cauta de lo que se podía esperar.
Si bien el sábado de madrugada se producía alguna representación, más simbólica que otra cosa, del fin de las mascarillas, la realidad es que conforme ha ido avanzando el día, en la mayoría de ciudades españolas no se ha notado mucho cambio con los días anteriores. Es más, la mayoría de la gente ha seguido usándola.
«De cada 10 personas que me he cruzado, sólo dos iban sin mascarilla», explica Nuria Salinas, una asesora comercial de Murcia que ha aprovechado este sábado para recuperar un viejo utensilio, el pintalabios. Y eso que en esta ciudad se han superado los 30º C este sábado.
Tampoco en Madrid se han dejado de usar los cubrebocas. «Me sorprende porque esperaba ver a muchas más personas sin mascarilla, pero la mayoría todavía las usa», dice Manuel Mas, cantante, en el centro de la capital, en unas declaraciones recogidas por Reuters.
«Para mí es importante seguir llevando la mascarilla», dijo Ángela Sosa, camarera madrileña que este sábado por la mañana se dejó caer por la Puerta del Sol.
Miedo A Las Variantes
Pero si la mascarilla es para la mayoría de las personas una molestia, ¿cuál puede ser el motivo de que sigamos siendo reacios a quitárnosla, aun cuando al aire libre ya no es obligatoria?
Uno de los principales factores puede ser que la situación actual de la pandemia no es mejor que la de hace 10 días, cuando el presidente Pedro Sánchez anunció el fin del cubrebocas en espacios exteriores.
La incidencia acumulada lleva tres días seguidos en crecimiento y lo que es más preocupante: este viernes lo hacía en diez comunidades autónomas. Asturias, Baleares, Canarias, Cantabria, Cataluña, Comunidad Valenciana, Extremadura, Galicia, Comunidad de Madrid y Murcia registraron un aumento de los casos de coronavirus.
En concreto, Cantabria, Cataluña, Andalucía y La Rioja tienen las incidencias más elevadas y, de hecho, la Junta de Andalucía ha recomendado que la gente siga llevando la mascarilla aun en la calle.
El motivo de estos aumentos y del miedo a dejarse el cubrebocas en casa está en la variante delta del coronavirus, que en comunidades como Cataluña ha llegado a suponer el 30% de los casos y que a nivel global está amenazando con una quita ola.
De hecho, esta variante ha obligado a algunos países, como por ejemplo Israel o Reino Unido, a dar marcha atrás en algunas de sus medidas de relajación, como precisamente el uso de mascarillas en el primer caso, o retrasar las aperturas de actividades en el segundo.
El principal miedo de las autoridades sanitarias es que a pesar de que la vacunación va a ritmo de récord en todo el mundo en general y en España en particular, aún es mucha la gente que no está vacunada, y muchos de los que sí han recibido un pinchazo tienen solo la primera de la dos dosis, en el caso de los remedios de Pfizer, Moderna o AstraZeneca. Este problema se agudiza en el caso de la vacuna anglosueca, porque su pauta de vacunación comprende un periodo de tiempo más largo que las de las farmacéuticas estadounidenses.
Por ello, algunas comunidades han optado por acortar ese plazo entre dosis (que en principio era de 12 semanas) por 11 e incluso 10 semanas, para así tener a la mayor parte de la población a salvo de la variante delta, cuya sombra amenaza las sonrisas que llevaban 13 meses cubiertas por mascarillas… y puede que algún tiempo más.
La mascarilla dejará de ser obligatoria este sábado en exteriores siempre que se pueda mantener la distancia de seguridad de 1,5 metros. La ministra de Sanidad, Carolina Darias, explicó este jueves los detalles del anuncio, y aclaró varias de las dudas que persistían hasta ahora: por ejemplo, no será obligatorio llevar una mascarilla en el bolsillo en todo momento, pero sí será obligatorio seguir haciendo uso de ella en múltiples situaciones, por lo que es recomendable tener una siempre disponible; además, incumplir la normativa y no ponérsela en aglomeraciones o en espacios cerrados seguirá siendo objeto de sanción, como hasta ahora.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Darias dijo que esta es una decisión «tremendamente importante», y que se toma porque «los indicadores van mejor» y porque la vacunación «va como un tiro». Todo ello permite, según la ministra, introducir «flexibilidad» de forma «prudente» en el uso de esta medida de prevención, «de la mano de la evidencia científica» y partiendo de la base de que la transmisión al aire libre es muy inferior a la que se registra en espacios cerrados. «Las mascarillas dejan paso a las sonrisas», celebró la titular de Sanidad.
En concreto, no habrá que usar la mascarilla en exteriores «siempre que mantengamos la distancia interpersonal de 1,5 metros» o que «vayamos con convivientes». En todos los demás casos, sí habrá que emplearla, especialmente en «aglomeraciones».
La mascarilla seguirá siendo «obligatoria» tanto en espacios cerrados –como, por ejemplo, una biblioteca–, abiertos al público –como un supermercado o una farmacia– y en los medios de transporte –metro, autobús, taxis…–.
Asimismo, seguirá siendo necesaria en los eventos multitudinarios como conciertos, cuando estemos de pie, pero podremos prescindir de ella si estamos sentados y se puede mantener la distancia de 1,5 metros.
También se librarán de la mascarilla las personas que vivan en residencias, siempre que la vacunación supere el 80% en el centro. Los trabajadores del centro, en cambio, tendrán que seguir portándola.
Se Mantienen Las Multas
La progresiva «liberación» de la mascarilla –término que empleó la ministra– no elimina las multas para quienes incumplan la normativa. Aquellos que no usen la mascarilla en aglomeraciones, en espacio cerrados o en el metro, por ejemplo, seguirán recibiendo una sanción de 100 euros.
Sin embargo, no será objeto de sanción el hecho de no portar una mascarilla en el bolsillo, siempre y cuando estemos en un escenario en el que no sea obligatorio llevarla puesta. Es decir, por el hecho de no llevar una mascarilla en el bolsillo no se sancionará a una persona que esté paseando por la calle en solitario o con convivientes y que respete la distancia de 1,5 metros. Sin embargo, si esta persona decide entrar en un espacio cerrado o se encuentra con una aglomeración y no tiene una mascarilla, sí podrá ser objeto de sanción. Por todo ello, la ministra recomendó tener siempre una a mano.
Esta normativa se aplicará en todo el Estado por igual, pese a que algunas comunidades autónomas han expresado su deseo de modular la regulación de las mascarillas. «En pandemia entramos juntos y vamos a salir juntos», dijo Darías, quien se mostró partidaria de que haya un «tratamiento igualitario en todo el territorio nacional» para «transmitir certeza». «Es importante que siga siendo así», recalcó.
Finalmente, y preguntada por la variante delta, Darias se limitó a decir que el Ministerio está «muy pendiente» de su avance y que el virus «va a seguir mutando» hasta que la vacunación se extienda lo suficiente como para impedir que contagie a más personas.
Harper-Lee Farnthorpe, de dos años, murió trágicamente en Inglaterra después de tragarse una pequeña pila de botón, según ha informado el medio inglés «Daily Star». La niña comenzó a vomitar sangre en casa y, finalmente, murió en el hospital tras haber perdido la mitad de la sangre del cuerpo.
La familia cree que la pila pudo provenir de un mando a distancia para la tele. Stacey Nickin, su madre, contó en una declaración pública como sucedió el trágico incidente: «la niña almorzó con su hermana. Mi hija mayor estaba con ella y yo fui a trabajar», dijo. «Media hora después recibí una llamada de mi hija, dijo que había llamado a una ambulancia porque Harper-Lee estaba vomitando sangre». Su madre se apresuró a volver a casa solo para encontrar a los paramédicos en su casa.
Perdió La Mitad De La Sangre Del Cuerpo
Inmediatamente, en cuanto Harper comenzó a vomitar sangre, su hermana llamó a la ambulancia y Harper fue trasladada al Royal Stoke Hospital. Allí la pusieron hasta dos litros de sangre para compensar todo lo que estaba perdiendo, pero fue inútil.
Los médicos lucharon por salvar la vida de la pequeña y se la llevaron para una cirugía de emergencia, pero no hubo nada que hacer, la niña había perdido más de la mitad de la sangre de su cuerpo.
«La llevaron a cirugía y más tarde me dijeron que había fallecido durante la cirugía. Me dijeron que podría haberse tragado una pila de botón» contó su madre. «Cuando volví a casa, encontré un mando a distancia al que le faltaba una pila en la habitación de mi hija.
La Opinión De Los Médicos
La doctora Anna Piggot, pediatra del Royal Stoke Hospital, describió ante un juzgafo las lesiones de Harper: «Tenía la presión arterial alta y estaba pálida. Tenía sangre en la boca y había perdido la mitad de la sangre de su cuerpo. Además, había lesiones ulceradas en el esófago medio y una gran coágulo de sangre».
Todo eso causado por haber ingerido una pila de botón que la niña ya había expulsado pero cuyo «ácido se filtró y permaneció en su cuerpo» hasta causar todas esas lesiones. Finalmente, murió por una arritmia y por las complicaciones derivadas de una hemorragia.
«Estaba Llena De Vida»
En su declaración pública, la madre de la pequeña, Stacy, describió a su hija: «Harper-Lee estaba interesada en todo y se estaba desarrollando bien, no había preocupaciones con ella», dijo. «Estaba llena de vida y todos la queríamos» añadió. Pero tenía una «tendencia a meterse cosas en la boca».
Esto demuestra la peligrosidad de que los niños se metan cosas en la boca y por ellos las asociaciones de pediatría pides que se vigile de cerca a los niños y que no se deje nada que puedan tragarse a su alcance.
En el acceso a la calle Preciados desde la plaza del Callao un panel digital advierte a los viandantes: «Mantenga la distancia social. Utilice mascarilla». En una de las zonas más concurridas de Madrid, la primera indicación es difícil de cumplir; la segunda sí la acatan prácticamente la totalidad de quienes pasan por aquí. Pero, ¿qué ocurrirá a partir del sábado?
Este jueves, el Gobierno se ha reunido en un Consejo de Ministros extraordinario para aprobar la ley que acaba con la imposición de llevar tapadas la nariz y la boca en espacios abiertos y que entrará en vigor este 26 de junio. Después de 13 meses en los que ha sido obligatorio utilizar la mascarilla en cualquier circunstancia y lugar, el Ejecutivo ha decidido flexibilizar su uso, siempre que se pueda garantizar el metro y medio de separación entre no convivientes.
«En un fin de semana paseando por estas calles, ¿quién controla el metro y medio?», se pregunta Pedro Carpintero, de 38 años, mientras echa un vistazo a su alrededor. «Esas normas luego son muy amplias y me da un poco de miedo que en sitios como este, donde hay mucha gente, pudiera haber contagios. Si uno va al campo, yo lo he hecho, se la quita porque ahí estás solo. Hay que tener sentido común, pero como no lo tenemos creo que los políticos tienen que poner normas y en este caso, cuanto más restrictivas mejor, porque está en juego la vida de las personas», añade al ser abordado por 20minutos.
Este diario ha salido a la calle para conocer la opinión de los ciudadanos sobre la situación que se presenta a partir de este fin de semana y las sensaciones oscilan desde la alegría de quienes creen que ya era hora a la preocupación de quienes piensan que es una decisión precipitada. Entre los primeros se encuentran principalmente los más jóvenes.
«Se lleva haciendo en Europa mucho tiempo, incluso desde que se acabó el confinamiento en España. Veo que si está bien definido está perfecto porque está demostrado que al aire libre no nos tenemos por qué contagiar tan fácilmente», señala José Javier Cabeza, de 24 años. «Si puedo libremente quitarme la mascarilla en sitios no concurridos lo haré. Sí es verdad que en sitios concurridos me la pondré», agrega.
«Yo estoy a favor de la medida porque me parece un incordio llevarla y al aire libre dicen que el virus no se contagia tanto. Si no hubiese pasado la Covid sí llevaría mascarilla en espacios con más gente pero al haberla pasado pienso que tengo anticuerpos y estoy más relajada. La llevaría en el bolsillo si tengo que coger el metro o si voy a alguna tienda pero si sé que no voy a entrar en ningún sitio no la llevaría», apunta Paula Herrada, de 24 años.
La postura de estos chicos contrasta por ejemplo con la de Mar Ferro, de 50 años. «Pienso que no se debería eliminar su uso obligatorio, de hecho yo no me la voy a quitar. Creo que es pronto porque, esperemos que no, pero puede que suban los contagios», comenta. «Me parece quizás demasiado precipitado. Yo no me la voy a quitar, desde luego», coincide José Miguel Mohedano, de 73.
El Real Decreto que se publicará en el BOE no afecta a las indicaciones sobre el uso de la mascarilla en espacios cerrados, donde seguirá siendo obligatoria. «Esa es una cosa que temo, que el mismo día que nos permitan no llevarla en exteriores haya gente que se relaje en interiores, que no la lleve en el metro», señala Néstor García, de 20 años, quien espera «que la gente cumpla».
Igualmente preocupados por que esa relajación pueda producirse, son varios los expertos que están alertando de que es «fundamental» asegurar que la protección sigue usándose correctamente en interiores porque «no estamos al final de la pandemia, sino en plena pandemia».