
Kiko Hernández ha cambiado de hogar. El conocido colaborador de Sálvame lo ha hecho, según la revista Diez Minutos, por motivos de salud, ya que la revista asegura que este cambio se debe a la artritis psoriásica que padece, una enfermedad degenerativa que ataca a las articulaciones provocando dolor y falta de movilidad, y que le dificulta subir escaleras.
En el antiguo hogar, precisamente, escaleras había, ya que se trataba de una casa de cuatro plantas.
Sin embargo, y siempre según la misma información, su nuevo hogar se trata de un chalet de una sola planta y de unos 700 m2 de vivienda, piscina cubierta y más de 3.000 m2 de parcela llana, con un valor de mercado actual de alrededor de 2,5 millones de euros.
La citada revista, además, publica este miércoles fotografías de la mudanza a su nueva casa, para la que hicieron falta hasta cinco camiones. En ella, el colaborador se instalará con sus hijas, Abril y Jimena, de cuatro años y medio.