El piloto de una aerolínea de Indonesia se subió borracho a un avión con 154 pasajeros a bordo y fue detenido instantes antes de despegar. Por el hecho fue despedido, mientras renunciaron dos altos directivos de la compañía.
El episodio salió a la luz luego de que se difundiera un video que muestra al capitán Tekad Purna, un piloto de la compañía indonesia low cost Citilink, mientras se acerca a los controles de seguridad del aeropuerto de Surabaya en un estado claramente no apto para pilotear un avión.
En las imágenes se ve al piloto presentarse tambaleando al puesto de control, sacándose el sombrero y dejando su bolso antes de pasar por el escáner corporal. Luego el hombre recoge su bolso, pero se le caen todas sus pertenencias en el suelo. Los agentes de la seguridad lo ayudan a recoger todo. También se le caen los anteojos, que se rompen. Finalmente el piloto sigue el camino. Además se ve como uno de los agentes se ríe ante el espectáculo ofrecido por el hombre.
Los pasajeros, en cambio, se volvieron sospechosos sobre las condiciones del piloto cuando escucharon que tenía dificultad para hablar y hacía anuncios poco claros desde la cabina. Hasta que alguien se bajó del avión pidiendo un reemplazo para el hombre, que creyeron borracho o bajo el efecto de alguna droga.
Citilink -una compañía que depende de la compañía de bandera Garuda Indonesia– le asignó un nuevo piloto del Airbus A320 una hora más tarde, aunque varios pasajeros decidieron no viajar tras el hecho.
El vuelo viajaba desde Surabaya, la segunda ciudad de Indonesia, hasta la capital Jakarta. El avión es un medio de transporte muy usado en un país que cuenta con 17 mil islas y el hecho generó mucha preocupación sobre el nivel de la seguridad de las aerolíneas.
Por su parte, el presidente de Citilink, Albert Burhan, se disculpó y dijo: «El piloto cometió una seria violación de los procedimientos estándar que puso en peligro a los pasajeros. Pedimos disculpas por la molestia. Tengo que hacerme cargo de esto y por eso yo y mi director de producción vamos a renunciar».
En un primer momento la aerolínea había afirmado que los test para las drogas y el alcohol sobre el piloto dieron resultado negativo. Pero más tarde confirmó que estaba «físicamente no apto» , aunque los resultados de los exámenes serán difundidos más adelante.
Ahora el piloto está investigado por uso de drogas o ebriedad. El ministro de Transporte le prohibió volar mientras avance la investigación y, si las acusaciones son confirmadas, se le retirará la licencia.
No es la primera vez que en Indonesia ocurre un hecho de este tipo. En diciembre del año pasado tres miembros del equipaje -un piloto y dos azafatas- fueron detenidos por consumir metanfetaminas en un hotel.
«Espero que todos ustedes estén rezando. Rezaré también y esperemos que podamos regresar a salvo». No es el mensaje desesperado de un pasajero. Ni siquiera el de una azafata inexperta. Es lo que transmitió por los altoparlantes el capitán del avión luego de que se produjera el desperfecto técnico.
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